A veces la vida nos llena. Nos llena de
sensaciones, sí, los momentos, el aire, la atmósfera, nos llena.
Creo que la conclusión está en encontrarse a uno mismo y hacer lo
que uno realmente desea hacer, profundizar en lo que de verdad te
llega y te toca por dentro. RÍE, LLORA, GRITA, APRENDE, ERRA, DESCUBRE, pero,
sobre todo, no pierdas tu visión de futuro. Nos enamoramos, nos
corresponden, no nos corresponden... Bueno, el amor es ambiguo,
incluso conozco a gente que no cree en él, yo sí lo hago. El amor
es devoción, y si no es física, aún reside en nuestra mente, ¿no?
Actúemos o no, la idea, de amor que se torna sentimiento, sigue en
nuestra mente. El amor nos puede debilitar, pero no debemos perder la
esperanza, y mantenernos en la búsqueda de ese rayo de luz, creo que
cada ser humano tiene alguna pista para saber donde se puede
encontrar.
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